La cosa es que... se me hace demasiado desconfiado. En cuanto ve una mano cerca, se vuelve como loco, pese a que en todo este año, lo único que ha visto hacer a las manos es ponerle un trozo de manzana o lechuga, cambiarle el agua, limpiarle la jaula... Pero últimamente está yendo a peor. Lo tenemos en la terraza. Antes, cuando alguien entraba, se le quedaba mirando y si se acercaba demasiado durante demasiado tiempo le chillaba. Actualmente, en cuanto alguien entra él mira hacia la pared y abre las alas, buscando por dónde escapar. Hace poco, también ha llegado a "amenazarnos" un par de veces en cuanto entramos (pone el cuerpo en horizontal, como si fuera a saltar, hacia nosotros y mantiene el pico abierto). También me he fijado en que cada vez se posa menos en el palo más cercano a la puerta. Pero lo que me tiene más preocupado ha ocurrido esta noche. Normalmente se sienta a dormir en uno de los palos, siempre en el mismo (el más bajo), pero hoy se ha colocado directamente en...