Conservar
flores del jarrón y ramos
de flores
- El mejor momento para cortar las flores es por la mañana temprano.
- Evita que le dé el sol directo que entra por las ventanas.
- No expongas el jarrón a corrientes de aire ni a temperaturas altas (calefacción).
- Evita el ambiente seco.
- Con un cuchillo afilado aplica un corte sesgado al tallo, de unos 2,5 cm. Al cortar de forma sesgada se aumenta la superficie de toma de agua de la flor.
- Añade una dosis de conservante floral al agua del jarrón para que no proliferen las bacterias.
- Echar una aspirina es válido, pero sale más caro que los conservantes.
- Elimina todo el follaje que quede por debajo del nivel del agua.
- Usa un vaporizador para humedecer el ramo (quiere ambiente húmedo y fresco).
- Cambia el agua diariamente.
- Para que las flores aguanten más tiempo como recién cortadas, procura limpiar bien el jarrón cada vez que le cambies el agua y a su vez corta unos centímetros al tallo.
- Sitúa las flores lejos de recipientes con frutas y hortalizas, ya que el gas etileno que éstas desprenden mientras maduran podría dañar las flores. Igual pasa con el humo del tabaco.
- Si no usas conservantes, cambia diariamente el agua del jarrón y también recorta un poco los tallos a diario. El tema es que no se obturen los vasos conductores ni se infecten por bacterias.
- Las rosas te durarán más tiempo en el florero si diariamente cortas al bisel un trocito de sus tallos.
-
Si los capullos de las
rosas empiezan a encorvarse,
podría deberse
a la existencia de burbujas
de aire atrapadas en
sus tallos. Introduce
uno a uno en un recipiente
lleno de agua tibia,
corta 2,5 cm del tallo,
y entonces, con sumo
cuidado, intenta enderezar
los capullos mientras
el tallo sigue flotando
y su extremo cortado
permanece bajo el agua
durante media hora por
lo menos. Una vez que
la cabeza de la flor
adquiere una posición
erguida y estable, podemos
volver a introducirla
en el jarrón.
- Revivir
flores marchitas
Si las flores del jarrón se marchitaran antes de tiempo, prueba el procedimiento siguiente:
1. Córtales un poco los tallos.
2. Llena un florero con agua caliente.
3. Introduce en ella las flores y ponlas en un lugar oscuro.
4. Cuando el agua esté ya fría, puedes sacarlas y sustituir el agua caliente por agua fría.