Hoy he tenido una mañana pelín aburrida: Soy soprano en una coral, y el cura nos pidió por favor si podíamos cantar en una boda que se celebraba hoy a las doce y media de la mañana. Mi primera misa tridentina (todo en latín)y, como experiencia: un rollo bananero de dos horas. Al llegar a casa, mis cactus me habían dado mi recompensa al esfuerzo: el triacanthum y el mihanowichi florecidos, y la rebutia krainziana, también. En las fotos véis, que no coinciden: los gymnos son de mediodía-tarde, y la krainzina de día. La única que está como una campeona es la flavopurpúrea. Que por cierto, es de diferente color, depende de la rama. Si es amarilla, dura la pera. Si la flor es más bien verdosa, es más pequeña y dura menos días. Misterios muy misteriosos. Aquí tenéis una muestra de las flores. Como siempre, el resto, en www.cactusvalencia.blogspot.com
Aunque florezcan mil veces, nunca dejan de sorprendernos y esperamos las flores como agua de mayo.Son pequeñas satisfacciones que llenan un montón. Enhorabuena. Por cierto, ¿será que el latín les estimula?
Gracias a todos. La misa tridentina es estética. Para los que quieran ver algo bello, pues de cine. Y para los que queramos enterarnos de la fiesta....un asquito ché. La flavopurpúrea es un caso. Cada vez que la enseño, la gente cree que son de esas flores artificiales que pone la gente. Y cuando les digo que es de verdad, se quedan a cuadros.