Versos que al viento se van

Un dulce final

Derramabas lágrimas en silencio,
tu almohada no quiso darte respuesta.
No había explicación para que la fiesta
se volviese un duelo que no sentencio

ni alcazo a imaginar; ni reverencio
que mientras el traidor duerme su siesta
tranquilo, tú vives en una cuesta
sinuosa y palpitante que evidencio.

Descansa de una vez de tu tormento
y ven conmigo a pasear por la orilla
de este mar plácido del sentimiento,
jugaremos de manera sencilla
a ese juego, a ofrecer un pensamiento
en tu esperaza, que conmigo brilla.​

 

Una oración

Rebajado a la mínima expresión
dejaste que tu luz fuera infinita,
otorgándonos a todos la cita
con el Padre de todo corazón.

Y fue en ese momento, tu Pasión
por la que mi alma dulcemente grita;
que mi Espíritu, ya libre, no evita
recordar tu gloria y tu invocación.

A tí, Señor, pido con humildad
por todos mis hermanos, mis amigos,
que siembran semillas de tu Verdad;
para florecer entre los enemigos
y ser pura virtud de santidad.
Dales tu bendición y tus abrigos.​

 

¡Gracias!

¡Gracias por tenerme siempre a tu lado!
¡Gracias por darme parte de tu vida!
¡Gracias por ofrecerme una partida!
¡Gracias por ser tú mi ser mas amado!

¡Gracias por haber comprendido el hado!
¡Gracias por hacerte mi fuerte brida!
¡Gracias por esperarme en mi huida!
¡Gracias por verte alegre enamorado!

¡Gracias por conocerte doy a Dios!
¡Gracias por mi destino junto a ti!
¡Gracias por no decirme nunca adiós!
¡Gracias por volver siempre junto a mí!
¡Gracias por estar conmigo los dos!
¡Gracias por quererme contigo aquí!​

 

Mensaje editado por repetido y pendiente de uno nuevo.

 

Amigos

Un sentimiento precioso de esperanza
al conoceros llenó mi corazón;
por eso escribo ahora con pasión
de esta amistad por la que mi alma danza

un vals hermoso, siempre en alabanza
vuestra, por comprender mi situación
y dándome cariño y solución
recuperé la alegría que me alcanza.

Para vosotros son ahora estos versos
que con dulzura pongo en vuestras manos;
espero con ellos veros inmersos
en ese mar en que todos, hermanos,
podamos nadar, sabiéndose tersos
esos sueños que nos guían ufanos.​

 

Para sunsi y Julián

Nosotros

Uno a otro
nos complementamos
Juntos
somos y seremos

En todo momento
nos tendremos
para recordarnos
y demostrarnos
el otro al uno
cuánto nos queremos

Y en los momentos difíciles
juntos estaremos,
nos apoyaremos y así,
hasta el despertar de la vida
cada vez mas nos amaremos.​

 

Para Eli

​

 

Para Giuli

Una piedra preciosa

Abrochado en un rincón
tranquilo, puro y bello;
se encuentra el corazón
del jardín en tu cuello.
Una abeja lo miró
y sus ojos se encendieron,
extasiada se quedó
con el oro que vieron.
Y ese rubí engarzado,
reluciente como el sol,
a quien ama el girasol
perdiendo su cuidado.

Póntelo una vez mas
-dice el lirio del agua-
que nunca he visto jamás
tal belleza en tu fragua.

​

 

Ángel

Que posas sobre mí tus lindas alas,
que escuchas mi sufrido corazón
y lo consuelas con resolución,
lavando mi espíritu, me acicalas.

Ángel de mi guarda, que de las malas
veredas me apartas, con ilusión
te canto ahora a tí esta canción
vestida con las más humildes galas.

Es tu vuelo sutil en mi conciencia.
Es tu mano firme quien me sostiene.
Seas tú siempre mí mayor influencia
y esté presto para lo que se viene
con esa gran fuerza y que en la presencia
de Dios, nuestro amor se desencadene.​

 

Amor bucólico


Entre las rosas escondida anoche
bajo la luz de la luna, mi amor
estaba; durmiendo con el calor
de las estrellas errantes. Un broche

divino que no admite ni un reproche,
tu rostro sereno, germinador
de mis sentimientos; que con ardor
fluyen desbordados y sin derroche

sobre tu pelo, miel y fantasía.
De tus ojos profundos y castaños
descendió una lágrima de ambrosía;
quizás por recordar todos los daños
que costó encontrarnos con alegría

mientras dábamos agua a los rebaños.​

 

Una sombra pasó por mi semblante
sabiendo que no estabas junto a mí;
tristeza inmensa por no verte aquí
a mi lado, teniéndote delante

guiando mis pasos, hasta que el amante
momento en el que te reconocí
como mi vida para siempre... Sí;
sé que mi camino será trepidante.

Y mi ánima, porque estaré contigo,
sentirá consuelo siempre a tu lado.
En los peores instantes tendrá abrigo
con tu sonrisa y tu ánimo templado,
que con la fuerza eterna de un amigo
podrá por una vez haberme amado.​

 

Amor Eterno

Aquel día que no pueda tenerte
junto a mí, recibiendo tus caricias
tus besos, tus susurros, tus delicias;
sentiré mi alma triste por perderte.

Pero sé que mi amor por tí es tan fuerte
que mi pecho, lleno de tus albricias,
recordará siempre tus primicias.
Y seremos, mas allá de la muerte,

dos espíritus unidos y amantes
que se sienten libres de la pasión
y la necesidad terrena de antes.
Entonces, nos tendremos por bastión
uno a otro y, ya sin interrogantes,
seremos siempre un solo corazón.​

 

Condenado bicho

En la charca nació aquel señorito
que vive sólo de sus picotazos
y llena de ronchas mis pobres brazos...
Vampiro funesto va, de hito en hito.

Un repelente es lo que necesito
y estar libre de tus aguijonazos.
Si no puedo matarte a manotazos,
con un flis flis te daré el finiquito.

En la noche necesitaré alerta
estar, no siendo venga ese maldito
y se encuentre con la ventana abierta
y me imponga otra vez su sambenito.
A este insecto le cerraré la puerta,
no quiero volver a ver ni un mosquito.​

 

Para tod@s l@s amig@s de "Una Caricia, Un Abrigo"

Hoy, en día de duelo, no dormía
pensando en lo que soy y nunca pude,
y a mi mente, como un espectro acude
aquel recuerdo que tanto temía:

Que sólo estaba y así quedaría,
que nadie estaría cuando yo dude;
y eso me hizo gritar: ¡Qué alguien me ayude!
Nadie respondió en esta noche fría.

Y el silencio hizo presa de mi ser
y busqué consuelo con ustedes,
que tienen el bellísimo poder
de ofrecernos a todos sus mercedes
a cambio del maravilloso placer
de una amistad que siempre ofrecer puedes.​

 

De un tiempo a esta parte vivo en la nube,
que no en las nubes; y redescubriéndote
mi alma, vestida con tus galas, viéndote
feliz, dichosa y serena. Y sube

mi esperanza hacia el cielo y el querube
recoge mis anhelos; y sonriéndote
te arropa en el camino, complaciéndote
en todos tus deseos. Él, que hube

perdido una vez, por fin me encontró;
y su voz eterna en mi corazón
como una llama encendida brilló.
Por tí escribo ahora con tanta pasión
este cántico sincero; y yo
espero te sirva de inspiración​